Albóndigas caseras tradicionales.



Para mis amigos.
Esta receta de albóndigas es la que Angelina ha cocinado desde siempre. Receta que heredó de su madre y receta que ya cocinan mis hijas. Yo las voy a guisar tal cual pero con un pequeño cambio (reduzco el pan rallado y pongo algo de miga de pan mojada en leche).
Quedan más suaves y esponjosas.
Ingredientes:
1/2 Kg. de carne picada de cerdo y 1/2 Kg. de carne picada de ternera; 4 huevos; 1 cebolla; 4 dientes de ajo; 2 cucharadas de pan rallado ; la miga de pan de 1/2 bollo; Leche; Perejil; Pimienta molida; Harina; Aceite y Sal.
Para la salsa: Media cebolla; 3 dientes de ajo; 1 tomate; Laurel; Nuez moscada rallada; Vino blanco; Aceite y Sal.
Elaboración:
Primero vamos a preparar la masa de las albóndigas: Mezclamos las carnes de cerdo y de ternera. En un bol grande amasamos la carne con los huevos batidos, la cebolla, el ajo y el perejil picados en fino. Agregamos a la masa sal, pimienta molida, 2 cucharadas de pan rallado y la miga de pan mojada en leche.
Mezclamos todo muy bien hasta quedar una masa homogénea.
Una vez terminada la masa, con ayuda de una cuchara vamos tomando porciones y con las manos hacemos las albóndigas.
Las enharinamos, las freímos en aceite de oliva y las reservamos.
Ahora vamos a preparar la salsa: En una cacerola hacemos un sofrito con la cebolla y el ajo picado. Cuando estén pochados, agregamos el tomate rallado, el laurel, ponemos sal y seguimos cocinando hasta terminar el sofrito. Añadimos un vasito de vino blanco que llevará incorporada las ralladuras de nuez moscada y cocinamos unos minutos para que se evapore el alcohol del vino. 
Sacamos el laurel y trituramos la salsa con ayuda del brazo de la batidora. Seguidamente incorporamos las albóndigas y cocinamos hasta que estén guisadas y la salsa reducida. (Estamos cocinando a fuego  medio y procurando no romperlas al remover para darles la vuelta).
Una vez terminadas, se sirven con su salsa acompañadas de patatas fritas.
Detalles: Si hacemos más cantidad de albóndigas de las que vayamos a consumir en el día, podemos congelarlas antes de  meterlas en la salsa.
Un abrazo.
                Pepe Atalaya.

Sevilla, 5 Marzo 2013.









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